Este juego me ha resultado bastante entretenido, su temática es divertida y te ayuda a ponerte en la piel del otro, de alguien que ha perdido su empleo y tan solo posee 1.000 dólares para rehacer su vida: buscar trabajo, alquilar una vivienda.. etc. El juego termina cuando los jugadores se quedan sin dinero antes de final de mes.
El juego en sí me ha producido incertidumbre e inseguridad de no saber qué hacer con el dinero, e indecisión, de no saber si estás haciendo lo correcto o no con el dinero. La indecisión de hacer una comida saludable o mantener las luces encendidas, de cubrir el mínimo en sus tarjetas de crédito o pagar el alquiler, etc.
Este juego lo usaría con adolescentes para la concienciación de la importancia que tiene el dinero y el simple hecho de tener una vivienda digna en la que poder vivir. También, lo usaría con personas que se encuentran en desempleo para ayudar a su inserción laboral.
No hay comentarios:
Publicar un comentario